•Editada en 1962, la novela El pecho y la espalda retrata la realidad del campo, donde su p

•Mediante sus páginas, Ritter propone un tomo de denuncia, donde expone el drama social campesino y sus vicios.
•En la trama aparecen intrigas lugareñas con personajes que abusan de su poder. Es allí donde el doctor Reyes se presenta como el médico que se interesa no solo por los males físicos, sino también por los problemas de índole social.
•Jorge Rofolfo Ritter (* Arroyos y Esteros, Paraguay, 7 de julio de 1908 - Buenos Aires Argentina, 1 de febrero de 1977) fue un escritor paraguayo y médico de profesión. Escribió tres obras novelísticas, además de cuentos y obras teatrales.
•Sus tres novelas más importantes son El pecho y la espalda (1962), La hostia y los jinetes (1969) y La tierra ardía (1975). También escribió dos obras teatrales, una de ellas titulada El médico rural, estrenada en el Teatro Municipal de Asunción (Paraguay), con la actuación de Ernesto Báez. También redactó la pieza escénica Los hijos, obra actualmente inédita. Asimismo, colaboró en varios periódicos paraguayos, redactando ensayos, además de cuentos.
•Teresa Méndez-Faith, redactó en su libro "Breve diccionario de la literatura paraguaya", que es una antología de escritores paraguayos, una breve síntesis de la obra de Ritter.
•"Ritter incorporó en su obra las experiencias que su carrera le ha brindado de la dolorosa realidad paraguaya. En su novela El pecho y la espalda (1962) descubre las angustias y el desamparo social de la gente del campo, preocupación que también permea las páginas de La hostia y los jinetes (1969), su segunda novela. Del resto de su producción narrativa hay que destacar La tierra ardía (1975), novela sobre la Guerra del Chaco(1932-1935
•El 1 de febrero de 1977, cuando Ritter estaba en Buenos Aires (Argentina), un vehículo lo arrolló accidentalmente, provocando su deceso.
•• Según el prologuista de una de las obras de Ritter, él encabezó la llamada Generación de 1928, del Colegio Nacional de la Capital, que tuvo a varias figuras que se dedicaron a la docencia, al periodismo y al arte, dejando su contribución a la cultura.
•• El galeno también escribió artículos en periódicos de la capital y el interior, entre ellos, en La Tribuna y El Progreso, de Asunción.
•• Además de sus obras novelísticas, el médico escribió el cuento La bombilla del comisario y la obra teatral El médico rural, inspirado en su experiencia profesional.
•• Para la realización de su novela La hostia y los jinetes, recibió asesoramiento de la escritora Josefina Plá. En tanto, el diseño de la tapa del libro lo realizó Olga Blinder.
•• Ritter también se dedicó a la pintura, plasmando paisajes campestres, el puerto de Concepción –donde vivió varios años–, además de obras con candelabros y otros utensilios, inspirados en el estilo de la naturaleza muerta.
•• Se asoció al Centro Filatélico del Paraguay. Fue director de la revista de dicha institución. También formó parte del Pen Club, donde conoció a poetas, narradores y ensayistas locales.
•• En 1995, el comité social de la Cooperativa Coomecipar reconoce su labor como médico y literato, por lo cual organiza un concurso literario de cuentos cortos denominado Doctor Jorge Ritter
• El médico rural
•Durante la década de 1940, Ritter comenzó a dedicarse por entero al ejercicio de la medicina en el interior del país.
•Su itinerario clínico se inició en la ciudad de Ybycuí, en 1942. En esta localidad se estableció y ocupó interinamente el cargo de director del hospital.
•Tras unos meses de estadía, enfrentó serios problemas con el curandero de la zona. Este hombre, que hacía el papel del médico ñana, estaba apadrinado por el comisario de lugar.
•El yuyero, adentrado en sus ritos terapéuticos de fuertes raíces ancestrales, encontró en Ritter una amenaza, que le provocaba la pérdida de pacientes.
•Ajeno a la medicina científica que practicaba, el brujo sanador difamó a Ritter, y aprovechó, en cierta ocasión, la enfermedad de una señora como excusa –con la venia del comisario– para apresarlo. Tras ser expulsado de Ybycuí, Ritter logró probar su inocencia en Asunción.
•Estas tristes experiencias –de las que fue víctima– y el gran desconocimiento de las zonas rurales hacia la medicina científica –de las que fue testigo– constituyeron su gran inspiración para escribir sus dos primeras novelas: El pecho y la espalda y La hostia y los jinetes.